Psicomotricidad
La psicomotricidad es una disciplina encargada de valorar y trabajar las facultades sensoriales, motrices, emocionales y cognitivas de la persona. Esta teoría suele aplicarse a niños y niñas, pues la infancia es una de las etapas donde el ser humano tiene mayor capacidad de aprendizaje y adaptación.
El objetivo de la técnica psicomotriz es lograr el desarrollo de la capacidad de expresión, creatividad y movilidad de las personas, a partir de la interacción con su propio cuerpo. Además, también busca mejorar la relación del individuo con su entorno, así como aprender a controlar las emociones e integrar el conocimiento.
La psicomotricidad se desarrolla en tres niveles:
a nivel motor o de movimiento corporal,
a nivel cognitivo o mental (atención, creatividad, concentración, etc.) y a nivel social y afectivo.
Pueden beneficiarse de este tipo de terapia los niños que muestran:
- Dificultades en la lectoescritura,
- Pocas habilidades sociales, dificultades sensoriales y motrices
- Tics, inquietud, inhibición o timidez extrema
- Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH)
- Baja tolerancia a la espera y a la frustración, rabietas, conductas agresivas, labilidad emocional, miedo o angustia
- Tristeza, duelo, dificultades en el vínculo
- Autismo o asperger (TEA), trastornos del desarrollo